Unidos por la solidaridad global: entrevista con Alberto de Belaúnde

Unidos por la solidaridad global: entrevista con Alberto de Belaúnde

Entrevista con Mirjam Puchner – Porque ella puede Leiendo Unidos por la solidaridad global: entrevista con Alberto de Belaúnde 8 minutos

¡El Orgullo es mucho más que una marcha! Cada mes de junio, esta celebración anual pone el foco en la defensa de derechos, el activismo, la educación y la celebración, fomentando el sentimiento de comunidad y pertenencia entre las personas LGBTQIA+. Es una oportunidad para mostrar solidaridad y seguir luchando por la visibilidad y la inclusión, incluso en sociedades donde ya se han conseguido importantes avances.


Uno de los momentos clave del año para waterdrop® es nuestra campaña del Orgullo. Por cuarto año consecutivo, tenemos el placer de apoyar a dos organizaciones sin ánimo de lucro, Outright International y Queer Base, donando el 10 % de los beneficios generados con la venta de nuestra Botella de vidrio Arcoíris. Este nuevo diseño de Edición Limitada, ahora en un formato más grande, simboliza la importancia de llevar la cabeza bien alta cuando se trata de defender la igualdad.


Para celebrar nuestra colaboración con Outright International, hemos tenido el honor de charlar con Alberto de Belaúnde (él), director del programa Queer Legal Futures de la organización. Abogado, activista LGBT y escritor peruano, Alberto fue uno de los primeros congresistas abiertamente homosexuales de la historia de Perú. Como político independiente y progresista, recibió en 2020 el premio Tammy Baldwin Breakthrough Award del Victory Institute por su labor en favor de la comunidad LGBT. Desde entonces, ha sido becario en el programa Yale World Fellowship y ha publicado dos libros, entre ellos el titulado Más allá del arcoíris. Autoridades LGBTI en Latinoamérica.

 


Alberto, es un verdadero honor contar contigo. Antes de empezar: ¿quién es Alberto más allá de los titulares y cargos?


¡Gracias a vosotros! Diría que soy un peruano orgulloso de serlo, casado con mi marido Diego desde 2021 (llevamos juntos desde 2011). Me encanta escribir, y estoy muy ilusionado porque el año que viene publicaré mi primera obra de ficción. También disfruto mucho cocinando; es una de mis formas favoritas de desconectar después de un día largo.


Hiciste historia como uno de los primeros congresistas abiertamente homosexuales en Perú. Echando la vista atrás, ¿cómo viviste ese momento? ¿Y qué es lo que te gustaría que la gente entendiera sobre esa experiencia?


Fue una mezcla de orgullo, responsabilidad y, la verdad, algo de miedo. Sabía que no se trataba solo de mí, sino de abrir una puerta que había estado cerrada durante demasiado tiempo. Creo que lo que más me gustaría que la gente entendiera es que la visibilidad importa, pero también tiene un coste. De repente, cargas con expectativas, esperanzas y, a veces, hostilidad. Pero nunca me sentí solo. Me sentí arropado por personas que llevaban años luchando por los derechos humanos, la dignidad y la justicia. Y sentí el apoyo de mis votantes, de quienes creyeron en lo que representaba y me volvieron a elegir. Esa solidaridad lo cambió todo. Me recordó que la representación no es solo algo simbólico: puede tender puentes reales entre las personas y el poder.


Tender puentes entre las personas y el poder: a nivel global, hay muchos frentes abiertos en lo que respecta a los derechos LGBTQIA+. ¿Cuáles dirías que son los retos más urgentes para la comunidad actualmente? ¿Y cómo está actuando Outright al respecto?


Estamos viviendo una especie de paradoja. Por un lado, hemos avanzado muchísimo en muchas regiones del mundo: el matrimonio igualitario, el reconocimiento legal de la identidad de género, la prohibición de las terapias de conversión... Pero, por otro lado, estamos viendo un retroceso muy organizado y bien financiado. En países de África, Europa del Este e incluso algunas regiones de América, se están aprobando nuevas leyes que criminalizan nuestra existencia o silencian nuestras voces. 


Uno de los mayores retos es la expansión global de los discursos antigénero y anti-LGBTIQ, que a menudo se promueven y coordinan a nivel internacional. Estas narrativas no solo atacan nuestros derechos, sino que también amenazan la democracia, la libertad de expresión y la autonomía sobre nuestro propio cuerpo.


En Outright colaboramos con socios locales en más de 50 países, apoyando los movimientos sobre el terreno con financiación, investigaciones y estrategias de incidencia política. Trabajamos con la ONU y otros organismos internacionales para asegurarnos de que las voces LGBTIQ sean escuchadas en los espacios donde se toman decisiones. Y estamos construyendo alianzas, porque este momento exige una solidaridad que también cruce fronteras, igual que lo hace el retroceso.


En waterdrop® creemos que el impacto real nace de las colaboraciones a largo plazo. Este ya es nuestro cuarto Orgullo junto a Outright. ¿Qué significa para ti este tipo de alianzas?


Estoy completamente de acuerdo. En Outright damos prioridad a colaborar con empresas que compartan nuestros valores y apoyen a nuestras comunidades de forma auténtica y valiente. Eso implica apostar por relaciones a largo plazo con organizaciones como la nuestra, con experiencia y alcance global, para impulsar un progreso real junto a grupos LGBTIQ. En un momento en el que muchas empresas están dando un paso atrás ante los crecientes ataques, el apoyo de waterdrop es más visible y valioso que nunca. Sus acciones reflejan sus valores. Estamos encantados de volver a colaborar este año en nuestro compromiso común por lograr la igualdad LGBTIQ en todo el mundo.


De todos los programas globales de Outright a los que se destinarán las donaciones de waterdrop®, ¿hay alguno que te toque especialmente de cerca?


Más que un proyecto concreto, lo que más me emociona es nuestra capacidad de actuar con rapidez cuando hay una crisis. Una parte de la donación de waterdrop nos permite precisamente eso: tener flexibilidad. Cuando comenzó la guerra en Ucrania, Outright pudo lanzar un fondo de ayuda para personas LGBTIQ en cuestión de días; esa misma semana, de hecho. Esa capacidad de reacción puede suponer seguridad, refugio o incluso la supervivencia para alguien en peligro.


Recientemente, hemos podido ayudar a organizaciones que lo perdieron todo cuando el Gobierno de Estados Unidos retiró su financiación a grupos LGBTIQ en varios países. Para muchas de ellas, eso significó poder seguir abiertas, seguir ayudando a sus comunidades y mantener viva la esperanza. Eso es lo que permite este tipo de apoyo: no solo programas, sino también presencia, solidaridad y acción cuando más se necesita.


Para quienes estén leyendo esto y quieran contribuir más allá de comprar nuestra Botella de vidrio Arcoíris, ¿qué pueden hacer hoy mismo?


Una de las cosas más poderosas que podemos hacer ahora mismo es sumarnos a la solidaridad global. Los ataques a los derechos LGBTIQ pueden variar de un país a otro, pero todos forman parte de un mismo movimiento de retroceso. Y nuestra respuesta tiene que estar igual de conectada. Así que, informaos, alzad la voz cuando sea necesario y apoyad a las organizaciones que están en primera línea.


Y si alguien quiere dar un paso más, le invito a conocer Outright International. En nuestra página de campaña anual “Outright Proud – Stronger Together” encontrarás acciones concretas que se pueden llevar a cabo para apoyar a comunidades LGBTIQ en todo el mundo. Cada día trabajamos con activistas valientes en todo el planeta para resistir, proteger y construir un futuro en el que todas las personas puedan vivir con dignidad y libertad, estén donde estén.


Para terminar


Gracias a colaboraciones como la de Outright International, el cambio, sea grande o pequeño, sigue siendo más necesario que nunca. Para la comunidad queer y personas aliadas, no hay una única forma correcta de celebrar el Orgullo: lo importante es mostrar una solidaridad clara y activa, defender sus derechos y amplificar sus voces, sobre todo ahora que muchas sociedades están viviendo retrocesos preocupantes. Forma parte del cambio: sé valiente, lleva la cabeza bien alta y muestra tus colores con orgullo.